Sulfatadoras

En nuestra sección de sulfatadoras encontrarás diversos modelos manuales y eléctricos de diversa capacidad con los que mantener el mejor cuidado de tu jardín o huerto. Además te ofrecemos un extenso catálogo de accesorios para sulfatadoras como boquillas, baterías y bombas.

Todas nuestras sulfatadoras

La sulfatadora es una de las herramientas más utilizadas en la jardinería ya que es muy útil para el control de plagas dañinas sobre las plantas. Existen muchos tipos de sulfatadores, como por ejemplo las sulfatadoras manuales, sulfatadoras eléctricas, de mochila, etc.

Selección de sulfatadoras manuales de mochila para tu huerto

Las sulfatadoras manuales son herramientas que sirven para fumigar el jardín, los arbustos o incluso los árboles frutales a largas distancias y de esta forma, se pueden controlar mejor las plagas. Al ser manual, este tipo de sulfatadoras funcionan con una manivela que hace presión y hace que el líquido vaya pulverizando las plantas.

Nuestras sulfatadoras eléctricas de mochila para mayor comodidad

Las sulfatadoras eléctricas funcionan con una batería recargable y cuentan con una autonomía determinada. Además, al ser de mochila se pueden cargar en la espalda y sulfatar con mayor comodidad, ya que permite tener las manos libres. Muchos de los modelos de sulfatadoras eléctricas que puede adquirir, traen un dispositivo para que puedan ser utilizadas y funcionar como una sulfatadora manual.

Boquillas, baterías y bombas de membrana para máquinas para sulfatar

Las sulfatadoras suelen incluir diferentes tipos de boquillas para trabajar con distintas presiones, con el fin de adaptarse al tipo de pulverización deseada. En el caso de que la sulfatadora sea eléctrica, se incluye un cargador para la batería. Sin embargo, todo va a depender del tipo de sulfatadora, modelo y fabricante

Preguntas frecuentes (FAQS)

A la hora de comprar una sulfatadora, hay que tener en cuenta si se trata de una de tipo manual o si es de tipo eléctrica.

 La sulfatadora manual o sin motor funciona con una manivela, por lo que resulta muy versátil y sencilla de usar, ya que basta con accionarla para ir pulverizando el líquido recogido en el depósito.

  

Por otro lado, las sulfatadoras eléctricas están diseñadas con un depósito donde se encuentra el líquido que será pulverizado a presión hacia fuera a través de un pistón accionado eléctricamente por una batería. Se diferencian de una manual en que cuentan con una batería integrada que hay que ir recargando cada cierto tiempo. 

 

Generalmente, la máquina de sulfatar manual es más económica que las sulfatadoras eléctricas al no disponer de una batería, aunque ambas herramientas cumplen con la misma función. Del mismo modo, ambas máquinas son muy utilizadas para sulfatar los árboles, los arbustos, los cultivos o jardines.

Aproximadamente, se puede sulfatar 200 m² con una sulfatadora manual o eléctrica de 5 litros, aunque siempre va a depender del modelo de la máquina con el que se esté sulfatando, sus especificaciones técnicas y el fabricante. Otro punto que hay que tener en cuenta es que dependiendo la regulación de la boquilla, se podrá sulfatar más o menos cantidad de terreno.

En primer lugar se debe extraer con cuidado la batería de la máquina de sulfatar que se va a cambiar. Seguidamente, cogemos la nueva batería y se retira la etiqueta del seguro del conector. 

Por último, se coloca la batería en el interior del chasis de la sulfatadora y se presiona en el centro de la batería hasta que se escuche el clic de ajuste. Es importante comprobar que la superficie del chasis y la batería quedan en el mismo nivel. Cuando hayamos hecho esto, basta con comprobar que la batería esté bien acoplada y funciona a la perfección. 

Para una mochila de sulfatar se debe utilizar un preparado especial para sulfatar cultivos agrícolas y es muy fundamental seguir las instrucciones del fabricante. Este tipo de preparados se pueden adquirir en cualquier tipo de tiendas especializadas y están diseñadas para que se puedan utilizar en una sulfatadora sin que la dañen.

Del mismo modo, hay que prestar atención a estos productos químicos para que no tengan efectos negativos sobre la salud humana. 

Por lo general, las sulfatadoras incluyen una boquilla ajustable, un vaso para medir las mezclas y un cargador en el caso de que la sulfatadora sea eléctrica. Sin embargo, cuando se va a comprar una sulfatadora, hay que prestar atención a todos los accesorios que incluyen, ya que siempre va a depender del modelo que se adquiera y del fabricante.

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